¿Aún dispongo de tiempo para encargar mi traje de novia o fiesta?
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RESPUESTA: El tiempo de entrega incluye el periodo de producción del traje y el periodo del envío del mismo al domicilio del interesado. El periodo de producción incluye tres fases; la primera fase se refiere a la selección de las materias primas, el corte del patrón de las telas, la tinción de las telas y la puesta a punto en la cadena de montaje. Dicha fase tiene una duración de 20-25 días laborables, aproximadamente. La segunda fase se refiere a la confección propiamente dicha y se inicia una vez los pedidos precedentes (cuyas fechas de entrega suelen ser anteriores en su mayoría y por tanto son encargos preferenciales) se hayan liquidado. Dicha fase tiene una duración de 10-15 días laborables aproximadamente. La tercera fase consiste en el envío del traje desde la fábrica a nuestra sede, con el cometido de poder pasar el control de calidad, proceder a su embalaje y proceder a su envío contrareembolso al domicilio del cliente. Dicha fase tiene una duración de 5 días aproximadamente. Por último, el periodo del envío oscila entre 2-3 días laborables. En total y por promedio anual, el plazo mínimo de entrega de un traje se aproxima a los 45 días laborables (si todo sigue su curso normal) y el plazo máximo puede llegar a los 60 días, contando con posibles imprevistos (derivados de circunstancias de producción adversas o posibles retrasos en los envíos
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El plazo de entrega puede variar considerablemente en función de las circunstancias de la producción y según cada época del año. En temporada alta (primavera), el tiempo de entrega suele ser el mayor respecto a las temporadas media (verano-otoño) o baja (invierno). Por último también puede variar en función de los modelos escogidos (existen algunos modelos por encargo cuya confección es más rápida; en torno a 15-25 días laborables y también existen ocasionalmente, trajes terminados en stock cuyo tiempo de entrega oscila entre 2-3 días laborables)
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El cliente es responsable de preveer posibles gestiones e imprevistos derivados del déficit del servicio postventa (no se factura), de modo que deberá sumar al tiempo de entrega máximo estipulado, otro periodo adicional y disponible en el tiempo, en el cual se tenga en cuenta la necesidad de complementar el traje con zapatos, cancan u otros accesorios que se consideren necesarios; además debe preveer la posibilidad y necesidad de un posterior reajuste del traje a las medidas corporales actuales (derivado de posibles errores en la toma de medidas, cambio metabólico o errores de fábrica en la confección, lo cual provocaría además, en este último caso, la necesidad de disponer de tiempo extra para la creación y envío de otro traje si no hubiera posibilidad de arreglarlo o bien, para el arreglo del mismo mediante el contrato de los servicios postventa de otra empresa o profesional ajeno a nuestra organización, e incluso la compra de otro modelo en otro comercio, contando con la ayuda de nuestra indemnización económica, bajo previo estudio y acorde en proporción al daño o perjuicio ocasionado. Por último, deberá tener en cuenta la posibilidad de destinar un tiempo al uso del servicio de tintorería (el cual tampoco facturamos), de modo que es muy posible que el traje necesite ser planchado por un especialista y podría además necesitar de una revisión general que incluya limpieza y retoque en ciertas zonas (aunque son trajes a estrenar, en especial, el color blanco impreso en los tejidos de los vestidos de novia, es muy proclive a presentar ciertas señales inevitables, en relación a pequeños roces entre los trajes en la cadena de montaje (por ejemplo, hilos sueltos que se esconden entre los bordados)
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Se recomienda disponer de una antelación mínima de 90 días, previa a la reserva, siempre que sea posible.
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El distribuidor puede negarse a tramitar los pedidos en los casos en que el fabricante prevea no poder ofrecer el producto a tiempo o de un modo arriesgado y por tanto, contraproducente para todas las partes implicadas y sólo tendrá en cuenta aquellos pedidos en los cuales se prevea la entrega con éxito garantizado.
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PLAZOS DE ENTREGA
Dependiendo del modelo escogido, el plazo puede variar; la mayoría de los trajes del catálogo se confeccionan en tiempo exprés (entre 15-25 días) y para los restantes, el plazo de entrega oscila entre 25-45 días (véase en la ficha de cada modelo del catálogo). No obstante, si el cliente opta por la confección a medida (en el caso de no poder adaptarse a ninguna de las tallas ofertadas), independientemente de haber escogido o no otro color diferente al de serie, el tiempo se fijará siempre en 35-45 días para cualquiera de los trajes del catálogo.
El tiempo total de entrega incluye el periodo de producción del traje y el periodo del envío del mismo al domicilio del interesado. El periodo de producción incluye tres fases; la primera fase se refiere a la selección de las materias primas, el corte del patrón de las telas, la tinción de las telas y la puesta a punto en la cadena de montaje. La segunda fase se refiere a la confección propiamente dicha y se inicia una vez los pedidos precedentes (cuyas fechas de entrega suelen ser anteriores en su mayoría y por tanto son encargos preferentes) se hayan liquidado. La tercera fase consiste en el envío del traje desde la fábrica a nuestra sede, con el cometido de poder pasar el control de calidad, proceder a su embalaje y gestionar su envío por contra reembolso al domicilio del cliente. Por último, el periodo de envío oscila entre 24-48h laborables (según el destino y el cliente es avisado previamente).

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